Propspeed funciona porque es muy resbaladizo, de manera que no suelta ninguna sustancia tóxica al mas ni deja de ser efectivo a medida que los biocidas que contienen las patentes convencionales se van acabando.
Esta característica implica que, si el barco no se mueve, o se mueve muy poco como es el caso, los diferentes organismos que crecen habitualmente en los cascos tales como algas, balámidos (arneirón), caracolillo y ostras, se adhieren a la superficie, pero con una unión muy débil, de manera que es muy fácil de eliminar en mojado, simplemente pasando la mano, un trapo suave o una esponja.
La sustancia que une a los balánidos a los materiales a los que se adhieren es un adhesivo seis veces más fuerte que cualquier adhesivo fabricado por el ser humano, funciona bajo el agua y se resiste a la eliminación química. En las siguientes imágenes lo podemos ver bajo un microscopio de electrones:
El "pegamento" de los balánidos:
La imagen de la izquierda muestra el adhesivo sobre una superficie de metal perfectamente limpia (los pequeños huecos negros son cristales de sal del agua de mar) y la imagen de la derecha es el mismo adhesivo intentando formarse sobre Propspeed, se aprecia como Propsped dificulta el proceso, limitando la capacidad de adherencia. Esa estructura blanca que se ve en la imagen es calcio, parte de la concha del animal.
Un caso real Propspeed:
El pasado 25 de junio de 2015, el personal del Real Club Náutico de Vigo hizo el curso de formación necesario para ser aplicador autorizado de Propspeed pintando el saildrive y la hélice de un crucero de regata de 35 pies.
Este es el aspecto del barco tras la primera aplicación:
Este es el aspecto despues de aplicar Propspeed:
El barco se sacó del agua en enero de 2016 y otra vez el 22 de junio del mismo año.
Éstas son las imágenes:
Junio 2016 (12 meses en el agua). Después de una limpieza a mano.
En el siguiente vídeo, se puede ver todo el proceso:
Propspeed recomendaciones de mantenimiento.
Cuando un barco al que se le ha aplicado Propspeed no navega o navega muy poco, basta con bucear el barco para eliminar la suciedad, o bien, como en el caso de este crucero regata, colgarlo del travelift el tiempo necesario para un lavado rápido, siempre en mojado para evitar rayar la superficie tratada.
Las claves para conseguir un tratamiento duradero son:
Limpiar de forma suave, sin rayar la superficie.
Utilizar la mano desnuda o en su defecto un paño o guante suave o una esponja, nunca estropajo ni lija.
No dejar pasar demasiado tiempo para evitar que los organismos alcancen un tamaño tal que dañe la superficie al limpiarla.
Limpiar siempre en mojado, no dejar que se seque.
Mantenimiento de Propspeed, un caso práctico.